
Nos encontramos con The Messenger, un juego que se estrenó en Nintendo Switch y PC. Ahora, os alegrará saber que ya está disponible en PS4, y el resultado es muy satisfactorio.
¿La típica historia? Hold my beer…
The Messenger nos presenta una historia curiosa. Somos un shinobi en una isla oculta. En ella se cuenta una historia de un héroe que salvará a todos del caos.
Cómo no, el mal se acerca y con ello el héroe. Lejos de controlar a este personaje, manejaremos al mensajero, que tiene que cruzar toda la isla con un pergamino.
El título, de gran calidad, mezcla un aspecto clásico con una jugabilidad totalmente absorbente. Tanto su música, su estética, y su estilo, nos presentan similitudes al mítico Ninja Gaiden o al legendario Metroid.

Las mecánicas son absolutamente simples, sobre todo al principio: atacar y saltar. Destaca la suavidad de movimiento del personaje. A partir de ahí se añadirán acciones como nadar o lanzar shurikens, reforzando el plantel de habilidades.
Al poco de jugar nos encontraremos con un buen sentido del humor. Algo que se aprecia aún más gracias a la localización al español.
También nos adentraremos en escenarios variados, con una música muy cañera, y en el que nos encontraremos, aparte de las dificultades plataformeras, mucha cantidad de enemigos.
Al final de cada zona nos tendremos que ver con un Final Boss. Este tendrá un patrón muy definido, haciendo que en cada jefe haya un timing más apretado. Esto dificulta las cosas y hace que cada ataque se mida al milímetro.
Como hemos dicho, el humor se agradece y aquí tanto el protagonista como los secundarios gozan de ella, incluyendo algunos jefes finales, sacándonos una sonrisa de vez en cuando.
¿Solo saltar y pegar? ¡Para nada!
Por supuesto, no todo son plataformas y humor, sino también elementos RPG, como mejorar nuestra salud o añadir habilidades para que nuestro héroe llegue a buen puerto.

¿Y se termina aquí? NO, y ese es el as bajo la manga de este gran título. Debajo de este plataformeo de acciones sencillas y movimientos fluidos, se esconde un segundo juego. Tras unas 4 horas de juego, el título te presenta un falso final y da paso a una estética que pasa de los 8 bits a los 16, convirtiéndose de golpe en un metroidvania.
Esto modifica bastante la jugabilidad, haciendo que exista un retorno a los escenarios ya jugados haciendo un mapeado retornable y dando de sí una característica nueva: el teletransporte.
Esta vez, ya con un mapa en mano, al estilo Castlevania, tendremos que ir completando cada rincón de los escenarios. No solo eso, sino que nuestra misión ya no será la de un mensajero, sino la de recoger notas musicales.
Es un sistema que nos permitirá pasar de un “escenario de 8 bits” a “uno de 16 bits” , podremos abrir nuevos caminos, referencias y enemigos.

Conclusión – The Messenger
En el panorama indie se sitúa en uno de los principales referentes: buena música, buen movimiento, sentido del humor, exigencia en el jugador y un giro que cambia con todo lo anterior.
En el lado negativo del título , sinceramente poco hemos de añadir.
La música puede ser algo estresante en situaciones de concentración , así como no tener una gran variedad de enemigos.

Te golpearás el pecho con:
- El retorno a los 8 y 16 bits.
- El sentido del humor y el plataformeo.
- La curva de dificultad excelentemente presentada.
Te golpearás la cabeza con:
- Una dificultad que puede hacer retroceder a algunos.
- Las mecánicas, demasiado sencillas para algunos.
EL VEREDICTO

Hasta aquí nuestra review de The Messenger. Para más reviews podéis echarle un ojo a Anthem, que no ha sido lo que esperábamos.
Pero lo que está claro es que The Messenger nos ha encantado. Así que hazte con él en PS4, Switch o PC. Por ahora, no se sabe nada de una versión en físico.
Análisis realizado con la versión de PS4 cedida por Cosmocover