
Los live-action basados en anime y manga son una de las tendencias actuales de Hollywood que genera más controversia. Rara vez hacen justicia a la fuente original y suelen recurrir al white-washing. Sin embargo, Hollywood continúa explotando este recurso. En 2017 tuvimos Ghost in the Shell y el intento de Death Note de Netflix, ambos acompañados por polémica y críticas. Ahora, podemos ver en cines Alita Ángel de combate (Alita: Battle Angel).
¿Por qué hacen este tipo de películas? No es ninguna gran revelación que actualmente en Hollywood escasea el contenido original. Basta con echar un vistazo a las películas con mayor presupuesto del año para ver que abundan los remakes, las adaptaciones de libros o cómics, las secuelas o precuelas, los live-action basados en películas de animación, etc.
Todo es una copia de una copia de una copia, como dice Edward Norton en El club de la lucha (Fight Club). Cualquier fuente es buena para adaptarla a la gran pantalla. Y el manga y el anime no son una excepción.

Alita Ángel de combate, ¿merece la pena?
Después de varias experiencias decepcionantes, es fácil mirar con recelo al nuevo miembro del club Alita Ángel de combate. Sin embargo, aunque no sea una película perfecta, se distancia claramente del resto de adaptaciones.
La película de James Cameron y Robert Rodríguez no es Ghost in the Shell. Realmente, Alita Ángel de combate podría ser el mejor live-action americano basado en manga o anime que hemos tenido hasta la fecha. ¿Cuál es la diferencia? Que Cameron conoce y entiende el material original y se ha comprometido a hacerle la mayor justicia posible.
La película tiene sus fallos. Los diálogos son muy mejorables y al desarrollo de los personajes y las relaciones entre ellos les falta tiempo para resultar del todo creíbles. Sin embargo, la historia, el mundo que presenta y los efectos visuales hacen de la película una experiencia más que disfrutable.

Esto no ha hecho más que empezar
Como los live-action de Disney, nos guste o no, las adaptaciones de manga y anime han llegado a Hollywood para quedarse. Durante los próximos años irán apareciendo cada vez más, tanto en la gran pantalla como en la pequeña.
Netflix está trabajando en una serie de acción real de Cowboy Bebop y J. J. Abrams producirá una adaptación americanizada de Your Name (Kimi no Na wa.). También lleva años hablándose de una adaptación de Akira, aunque el proyecto ha muerto y resucitado varias veces y no se sabe si acabará materializándose.
Y van a seguir viniendo, al margen de lo necesarias (o innecesarias) que sean. Solo cabe desear que Alita Ángel de combate se convierta en un modelo a seguir y no en la excepción que confirme la regla. Esperemos que Hollywood entienda que no basta con coger algo que funciona en un medio y trasladarlo a otro, tirando de millones de dólares y CGI. Es más que necesario entender el material original y hacerle justicia.
Si se hace de esta manera, tendremos más películas disfrutables como Alita Ángel de combate y menos quiero-y-no-puedos difíciles de tragar (y, desgraciadamente, de olvidar) como el Death Note de Netflix.

¿Has visto Alita Ángel de combate? ¿Crees que es una buena adaptación? ¡Dínoslo en los comentarios!